Los tiempos actuales no ofrecen paz ni sosiego a la gente. Cada vez tenemos una sociedad mas dificil e insegura. En esto no hay descanso. Vivimos aún una crisis enorme sanitaria. Se censura al gobierno por no haber tomado decisiones profundas a su debido tiempo. Los mismos que le criticaban por su inacción, ahora lo hacen por el mantenimiento de las medidas confinatorias. Los ultras piden libertad, se supone que para estar en las "terracitas" tomando alguna "cervezita" y darse algún "bañito". ¡Que tiempos aquellos donde se pedia libertad para otras cosas como poder expresar lo que se piensa, como formar parte de algunas asociaciones, partidos o sindicatos y poder manifestarse en la calle!.
Ahora se trata de hacer cosas tan "fundamentales" como beber alguna cerveza en alguna terraza. Se ha producido cambios profundos en el concepto de libertad. Sin embargo, permanecen las mismas actitudes radicales, de confrontación y odio. EL Roto expresa muy bien el hartazgo de cierta gente ante los constantes anuncios de catástrofes y "fines del mundo". Ayer lei un excelente articulo de Manuel Vicent en El Pais que finalizaa de esta manera. "Esta parece ser la tierra prometida de Cain en la que los políticos revientan de placer si el adversario fracasa. Para salvarse de este laberinto de rencor solo nos queda mirar el cielo limpio (se refiere a la mejora del aire con la baja conducción de coches por la pandemia y la limpieza del ambiente) antes de que lo volvamos a empozoñar cuando el miedo concluya. Existe una vacuna contra la rabia, pero no contra el odio; contra el cólera, pero no contra el cabreo, tampoco contra el resentimiento, la frustración y la mala baba hay vacuna en España. Después de esto, solo me queda decir; AMEN. Muy interesante también el articulo de Elvira Lindo y la entrevista con ESTHER DUFLO, premio Nobel el año pasado en Economia. Para saber por donde va, una frase: El crecimiento no implica bienestar. Dificilmente se puede oponer alguna objeción. Saludos y bienestar si es posible..
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