Hoy me he levantado, como siempre, a las 7:00. Ahora son las 17:00 y me siento, dispuesto a leer. Salvo el tiempo de la comida, no he parado y estoy cansado. Tenía pensado trabajar algo en la huerta, pues hace una buena tarde, pero prefiero sentarme y leer. Sobre mi mesa, están bastantes libros, pero los que están siendo objeto de mis atenciones son los que se ven a la izquierda. Salvo los dos libros de Verne (Viaje al centro de la tierra y Veinte mil leguas...) que aún no están estrenados, los demas están siendo leidos de forma alternativa. En estos momentos estoy dedicado a leer "Un millón de gotas". ya he pasado el ecuador y su historia no me permite dejarle.
El de Follet (El umbral de la eternidad), está impaciente con sus mas de 1100 páginas. "Los huesos de DEscartes", ya está leido hace tiempo pero deseo volverle a leer. Los libros de S. Zweig, Cortazar y Chesterton, a pesar de su grosor, están escritos en capitulos breves que permiten leerlos de manera pausada. También deseo leer las revistas de NG pues el contenido de las mismas es muy atractivo. Hoy hace una semana que murieron Nela y Boni. Esta mañana mi madre me preguntaba si les echaba de menos. Y la verdad es que aún les veo constantemente por todos los sitios y en todos los momentos. Debe pasar aún mas tiempo para que su ausencia se convierta en un recuerdo como una hoja caida de un árbol otoñal. Voy a leer, pero estoy cansado.
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