Comentaba ayer que hoy probaría las alubias blancas que me habia dado Enrique. Eran alubias que no requerian el remojo previo, y así las he puesto. Han tardado una hora y media en hacerse. No se han despellejado, tiene cuerpo pues no se llegan a deshacer y son sabrosas. En la foto de la izquierda se ven ya en el plato acompañadas (¡que hermosura de plato!) de un vaso de vino, también hermoso. Esa fué mi comida, rematada con fruta. Ahora he puesto alubias "verdinas" a remojo para mañana. Se nota que en mi casa el otoño ya ha comenzado. Continúo leyendo un excelente libro (Un millón de gotas); cuesta suspender su lectura pero en ciertos momentos, su dureza, me obliga a interrumpir su lectura. Creo que no solo el otoño se asienta en la casa, sino que el señor de la casa comienza a estar ya "otoñal". Intento ralentizar este proceso inevitable con el curso de internet (Photoshop) y algunas otras cosas, y hoy ya he iniciado el curso. Saludos.
El otro día, Carmen, me ha dado esta pieza de carne (codillo) que se ve a la izquierda. Las compra en Ikea, las congela y las va comiendo con Roberto cuando desean. Una vez descongelada, yo la he calentada en el horno. Simplemente es calentarla, pues ya está preparada y asada. No hay que sazonarla pues ya viene totalmente hecha. Es una pieza para dos personas y en mi caso, para dos veces. Hoy he comido la parte que se ve en la foto inferior. Mañana, 2ª parte. Este plato le acompaño con ensalada de tomate. El aspecto es muy bueno y está muy bien cocinado tanto en el sabor como en el punto. La verdad es que es un acierto.. No me importaría tener alguna pieza más en el congelador. Me dispongo a sentarme y leer algo, cuando por la radio se cuenta cómo se está desarrollando la marcha de la Diada en Barcelona. Para poner una música que sintonize con este acontecimiento, voy a escuhcar a Los Relmapagos. Volveré a escuchar canciones como Nit de Llampecs o La Santa Espina, cancio
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